¡Estamos en el aire!
Hoy el que aquí habla es un orgulloso aficionado a escuchar la radio. Es verdad, desde muy pequeño cuando, desayunando antes de ir al colegio, escuchaba junto a mi madre el programa matinal de Radio Nacional de España "La Bisagra" presentado por Javier Sardá y el Sr. Casamajor y ,posteriormente, "Hoy por hoy" de Iñaki Gabilondo en la Cadena Ser, aprendí a disfrutar y sentir pasión por este medio de comunicación. Es más, siento como mías las palabras de muchos de los profesionales del periodismo cuando afirman que, tras haber trabajado en los diferentes medios, siempre añoran y extrañan la radio (al igual que los buenos y pasionales actores sonríen cuando se les menciona la posibilidad de cambiar un plató por las tablas de un antiguo y coqueto teatro) ya que yo mismo no he encontrado ningún entretenimiento que mejore, sustituya o consiga hacerme olvidar a mi vieja amiga. Es realmente así como la veo, como algo sumamente personal y relajante. Me hace compañía cuando estoy a solas conmigo mismo, hace que me ría y que disfrute de algo que percibo tan sólo a través de uno de mis sentidos. Es única e irrepetible.
Una de las cosas que más me gustan de ella es que no es algo masificado ni extendido por la sociedad, lo que me permite considerarme afortunado. Es decir, cierto que muchísima gente escucha música a través de la radio, lo que seguramente forma el grueso de los oyentes nacionales. Esto reduce a un porcentaje relativamente bajo el volumen de personas que escuchan (no oyen, que es realmente algo muy diferente) radio generalista (esto es noticias, magacines, programas de humor, de política, de Economía...). Ahí es donde reside el hecho de que yo me considere afortunado. Porque, seamos realistas, mucha gente conoce a las estrellas de la televisión (Ana Rosa Quintana, Matías Prats, Anne Igartiburu, Andreu Buenafuente, Jesús Vazquez, Lorenzo Milá...) pero, ¿cuántos conocen o, como mínimo, a cuantos les suenan los nombres de las estrellas de la radio? Desgraciadamente, mucho menos conocidos y reconocidos son grandes profesionales de este medio como Carlos Herrera, César Vidal, Gemma Nierga, Carlos Alsina, Juan Pablo Colmenarejo, Julio César Iglesias, Javier Ares...La lista es mucho más larga, pero solo quería poner un ejemplo.
Sinceramente, me gusta tener la sensación de que solo a mí y a unos pocos más nos apetece disfrutar de la intimidad, cercanía y sencillez de este magnífico aparato, al cuál homenajeo desde este pequeño resquicio que he encontrado en sus cada vez más avanzados y revolucionarios enemigos.
La Prospe, Junio del 7
8 comentarios
me se respeten, pa variar -
"A ver si te atreves"
"Herrera en la onda"
"A vivir que son dos días"
"La ventana"...
BL! -
la rosa de los vientos!!
hablar por hablar!!!
el cine de lo que yo te diga!!!
no somos nadie!!
gomaespuma!! (aunque reconozco que no me hace gracia)
anónimo -
respétenseme -
Andrés -
belu -
siiiii... soy hermana del de arriba (y no me refiero a Dios)
Mariano -
Es curioso como se mezclan los medios tradicionales con Internet, no compiten por el mismo espacio. Uno puede escuchar la radio de cualquier país en cualquier parte gracias a Internet, o descargarse regularmente con toda comodidad sus programas favoritos en forma de Podcast que luego puede escuchar en cualquier parte (escuchar el larguero o la rosa de los vientos en el metro o en la biblioteca por ejemplo) con un reproductor MP3.
Sin embargo otros medios no dan esta comodidad y esta portabilidad.
No obstante algo grande de la radio es que no requiere la atención que requiere un periódico y deja una parte grande de su magia a la imaginación de cada uno...
Cuidate, Verheren sich (respetate!)!
anónimo -